Panorama del sector alimentario en México
La industria alimentaria es una de las más importantes para los mexicanos, no sólo por el aspecto cultural, sino también por el económico. Así, el sector se compone de tres grupos principales: la actividad agrícola, pecuaria y pesquera, los cuales muestran índices que identifican la situación actual de la industria. Gracias a esta información, se conoce que la producción del sector pesquero y agrícola del 2022 y 2023 fue similar, con un 0.3 % de disminución en el año más reciente; sin embargo, resulta notablemente menor a la estimación del 2024, que es 1.9 % menos que en el 2023, según datos del Gobierno de México.
Por otro lado, en el subsector pecuario, se espera que el 2024 presente un aumento porcentual de 2 puntos, a comparación del año anterior, que representan 25.6 millones de toneladas; así mismo, esta producción seguiría en aumento para el 2025.
Para el sector alimentario a nivel global, resulta un reto hacerle frente a los problemas actuales sobre el abasto de alimentos de alta calidad a las personas, pues los cambios climáticos resultan fulminantes para las plantaciones. Así mismo, en México, existen programas para cumplir este objetivo: mejorar la productividad del campo en conjunto con la tecnología; los cuales, se orientan a la producción supervisada, controlada y sustentable de las materias primas. De acuerdo a lo anterior, podemos mencionar una de las iniciativas internacionales llevadas a cabo para cumplir con este propósito: la impresión 3D para el sector alimentario.
Impresión 3D en alimentos: una tecnología en proceso
La impresión 3D ha sido una tecnología con gran potencial para diferentes industrias, aunque se ha visto principalmente en el sector tecnológico. Conforme ha pasado el tiempo desde su creación, se han innovado las maneras de aplicarla a otros sectores, como lo ha sido en el alimentario. Así, las impresoras 3D han permitido que se transforme la producción, hasta la personalización de los alimentos.
El aprovechamiento de esta tecnología se dirige a tres aspectos fundamentales: crear formas complejas, mejorar la eficiencia de producción y reducir los desperdicios. Como parte de la personalización, les permite crear texturas, sabores y nutrientes exactos para cada alimento, lo que satisface la necesidad dietética particular de los individuos.
Los trabajos de investigación siguen en desarrollo para permitir que cada vez más personas tengan acceso a los alimentos impresos en 3D, y no se restrinja a un proceso costoso, disponible en restaurantes exclusivos. Se espera que las innovaciones sean constantes y que esta tecnología permita un desarrollo sostenible para reducir la brecha de desabasto alimentario global
El sector se compone de tres grupos principales: la actividad agrícola, pecuaria y pesquera